La obra narra la vida de Roberto Álvarez quien fue el último representante del pueblo Chango en usar esta técnica que forma parte del patrimonio de los pueblos originarios de Atacama
En la Biblioteca del Museo Regional se realizó el lanzamiento del libro “El último constructor de balsas de cuero de lobo” escrito por Oriel Álvarez Hidalgo historiador del valle del Huasco, quien con su obra deja plasmado para siempre este notable invento del pueblo Chango. La actividad fue encabezada por el Subdirector Nacional de Pueblos Originarios José Ancan junto a la seremi de Desarrollo Social y Familia Yosselin Moyano.
Tras la presentación, el autor compartió con los asistentes una emotiva reflexión sobre su familia como una de las herederas de esta cultura en Atacama. “que se conserve la técnica que mi padre Roberto Álvarez en caleta de Chañaral lo hizo en los años 40, y que en los años 50 y 60 logró hacer algunas réplicas que permanecen en los museos de Copiapó y de la Serena donde hay una de tamaño natural, tal como la que él ocupaba y que lograron algunos científicos y estudiosos registrar esta técnica de balsa de cuero de lobos, lo que nos ha permitido a nosotros como familia y a mí en lo principal poder editar este libro y juntar estos antecedentes para beneficio de los estudiantes, de la gente, de los atacameños y del pueblo chango”.
El libro deja en manifiesto la vida cotidiana del pueblo chango, que mezcla con singular coherencia las habilidades de la caza y el buceo, con el pastoreo y el cultivo de pequeñas chacras, además de sus emblemáticas balsas de cuero de lobo que utilizaban a no más de 100 metros de la orilla. También ilustra acerca del intercambio de especies entre habitantes del borde costero y de los valles interiores quienes se acercaban a las caletas a intercambiar harinas, frutas verduras por pescados o mariscos. Una forma de intercambio que trasciende siglos de historia hasta nuestros días.
Al respecto la seremi de Desarrollo Social y Familia Yosselin Moyano dijo que “la presentación de este libro del último conductor de balsas de cuero de lobo, es una semilla, que hoy día se siembra de manera colectiva por todos y todas, que se entrega a los colegios de la región y a partir de ello, llega a toda la comunidad atacameña a nuestros niños, niñas y adolescentes de tal manera de seguir haciendo florecer nuestra cultura, nuestra identidad y nuestra historia atacameña que, sin lugar a dudas, se entrelaza con la cultura de nuestros pueblos indígenas y por supuesto, la cultura de nuestro pueblo chango que hoy día se reivindica a través de este simbólico libro y de esta simbólica actividad que estamos promoviendo en conjunto entre todos y todas”.
Finalmente, el Subdirector Nacional de Pueblos Originarios José Ancan se refirió a la importancia de la caleta Chañaral de Aceituno y señaló que “desde el año 2014 nosotros empezamos a participar con la caleta Chañaral. Emma apoyado iniciativas de revitalizadas cultural que la misma gente de la caleta ha planteado especialmente lo que es la sala museográfica que está en la en la zona, porque para nosotros la revitalización cultural planteados los propios pueblos es un elemento fundamental de la de la política indígena”.
